sábado, 21 de septiembre de 2013

Capitulo 19

Hanna estaba oficialmente preocupada. Desde la conversación que mantuvieron la noche anterior, había estado obsesionada con la idea de tener sexo con Jose Luis. Verlo esa mañana no había mejorado la situación. Todo lo contrario, apenas había sido capaz de correr. No dejaba de imaginar todo tipo de cosas. Cosas sexy. Peligrosas. Se le ocurrió que probablemente llevaba años teniendo esos pensamientos sucios con Jose Luis, pero como no tenían sentido, los había reprimido. En cuanto abrieron esa puerta, su imaginación se desbocó.

Y supuso que a Jose Luis  le pasaba lo mismo. Sin duda pensaba que el sexo entre ellos sería educado y civilizado.


Cuando estuvieron cerca del apartamento la gravedad del problema se tornó evidente. Costaba ser sutil con los malditos pantalones cortos. Pero cada vez que intentaba pensar en algo seguro, terminaba imaginándolo en la ducha. Aún no habían hecho nada y ya había perdido el control. Que Dios no permitiera que Jose Luis sacara el tema. No sería capaz de volver a mirarlo a la cara.

¿Porqué se le había ocurrido esa idea estúpida?¿Qué una vez que plantara la idea ya no podía desplantarla? Bueno, no pensaba caer si luchar. Valoraba demasiado su amistad. El sexo no podía suceder. Hanna no podría soportarlo.


— ¿Vas a tardar mucho en abrir la puerta?

Aturdida, se dio cuenta de que se había quedado quieta mirando la puerta de su casa no se sabe cuánto tiempo. Sacó la llave y la introdujo en la cerradura. Hanna entró primero.

Jose Luis, desde luego, tuvo que mirarle el trasero. Por enésima vez esa mañana. Nada había cambiado. Era el mismo trasero que había visto la primera vez. Aunque eso no parecía importar. Tenía que mirarlo. Admirarlo. Suspirar.



No hay comentarios:

Publicar un comentario